domingo, 14 de octubre de 2018

"El TESORO DE LA SABIDURÍA"

       (Fotografía de Stockvault)

Antes creía por error, que ser "SABIO" era SABER mucho sobre algún tópico, un concepto meramente intelectual.

Después que inicié EL CAMINO DE CONVERSIÓN de la mano del Señor, TODO se va TRANSFORMANDO, como dice la canción de Marcela Gandara: " Todo es igual pero YO SOY DISTINTO!".

TODO lo que antes era primordial como: estudiar una carrera, tener una posición social o destacarse en el área que querías...Se queda muy corto, nuestros "pequeños planes", NO son NADA frente a lo que DIOS quiere para cada uno de sus hijos.

LA SABUDURÍA, " EL SABER VIVIR"...

Es una materia que en mi caso, NO ha sido fácil a pesar de las capacidades y dones que EL SEÑOR me ha regalado.
NO SIEMPRE LA INTELIGENCIA, SE EQUIPARA CON LA SABIDURÍA.

Nuestros abuelos y personas mayores, NO tenían muchos conocimientos técnicos ni científicos, pero tenían herramientas VALIOSAS que adquirieron AL VIVIR. Con errores y aciertos, iban cosechando EXPERIENCIAS DE VIDA ÚNICAS, que ni usted ni yo tenemos.
Esto aunado a un nivel de TRASCENDENCIA ESPIRITUAL, que  los hacía: calmados, prudentes, honestos, sencillos y previsivos...nos mostraban la SABIDURÍA que NO se aprende en las universidades.

Por eso, SIEMPRE le pido a DIOS que me regale de su SABIDURÍA Y DISCERNIMIENTO, para que nuestros pensamientos y acciones, LO REFLEJEN en todo momento.
Que los demás vislumbren EL ESPIRITU DE DIOS que habita en nosotros y se antojen de CONOCER SU AMOR INFINITO Y SU MISERICORDIA.

Que la VERDADERA SABIDURÍA, nos guíe en el camino de la existencia. Ilumine nuestras decisiones y nos haga llegar A SER HIJOS DE ESE DIOS AMOR.

Como dice en el libro de Proverbios: "NADA SE COMPARA CON LA SABIDURÍA".
NADA la puede reemplazar ni riquezas, ni títulos...NADA de afuera.

ELLA HABITA SOLO EN EL HOMBRE SENSATO Y HUMILDE.

Que El SER SABIOS, según la voluntad de DIOS sin presunciones ni soberbía. Esto es contrario a la SABIDURÍA. Sea nuestro propósito para Cultivar y Acrecentar cada día, de la mano y con el Espiritu del SEÑOR.